"Quiero verte sonreír solo como tú sabes. Sí, ya sabes, con esa sonrisa que me quita el aliento, que hace que te salgan esas arruguitas a los lados de la cara, que hace que el mundo gire como una peonza y yo mientras mirándote, embobada. Esa sonrisa que eleva mi corazón hasta donde las estrellas residen. Quiero que sonrías, para así sonreír yo. Quiero que sonrías, pero que me sonrías a mí."

Who said that perfection doesn't exist?

Yo pensaba lo mismo. Luego apareciste.
Con tus imperfecciones perfectas. A tu manera. Nuestra manera.
En el momento en el que no encuentras imperfecciones que realmente importen, todo es más sencillo.
Te centras simplemente en esa sonrisilla que consigues sacarle, y en que consiga hacerte reír con cualquier tontería.
Cuando te mira y te sonríe crees que vais a poder con todo, que nada va a ser imposible. Porque no necesitas más que eso, no necesitas más que verle y poder hacerle feliz mientras está contigo.
Cuando estáis juntos no quieres irte de su lado y que tampoco quiere que te vayas. Estais separados y los minutos se hacen horas, las horas se hacen días y los días se hacen semanas.
Cada vez que sientes que no puedes más, ahí esta para que con una sola sonrisa y un simple abrazo consiga sacarte de esa realidad, meterte en ese mundo, vuestro mundo, y hacer que te sientas bien contigo misma.
Llegas a ese punto en el que puede controlar tu estado de ánimo, y que con esa sonrisa o con esos gestos, consiga más de lo que puedan conseguir miles de palabras.
Sí, puede que todo cambie, pero ya sabes, para mejor.

Me encantas. 
¿Lo entiendes o te lo explico a besos?

A veces considero que es mejor no pensar. 
Porque, ¿qué vas a conseguir dándole vueltas y más vueltas a todo?
Consigues cansarte, amargarte, desganarte... 
Pero después de que te hayas llevado alguna que otra decepción, cuando empiezas a dejar de ver siempre lo malo e intentas poner de tu parte para que todo vuelva a la normalidad, por fin ocurre algo bueno. 
Hay cosas inevitables, por más que se intenten disuadir. 
Por muy mala que sea la situación, por difíciles que parezcan las cosas, puedes acabar consiguiendo eso que te proponías. 
A veces puede parecer inalcanzable, pero... ¿De qué sirve rendirse a la primera de cambio? 
No todo son rosas en el camino. 
¿Piensas que este va a ser el último problema que tengas? 
Te equivocas, vas a tener muchos mas, tienes una vida por delante. 
Pero te será más fácil seguir adelante si tienes a tu lado a las personas correctas. Puede que entren otras en tu vida, y puede que salgan otras tantas, pero las correctas, se quedarán ahí siempre. Solo si son las correctas.
Para esto, mejor no mirar atrás, mejor no cerrar los ojos. La mejor manera de conseguirlo es poner de tu parte, y saber que hay una pequeña posibilidad, aunque sea una entre un millón, de que consigas eso que te propones. 
Fuera pesimismo. Fuera calentamientos de coco.